Insidia
de
alma triste
que
vincula amor
al dinero que compra todo:
sexo,
presuntos amigos,
pobres, mezquinos
y falsos.
Y el amor solo
cuesta darlo en el salón,
en la cama, sin nada a cambio,
con ternuras sin nombre.
Si hay dinero habrá artículos
que con el uso pierden brillo
y va a por nuevos modelos
y de alta gama,
que loan
hasta mendigos
en busca de fama,
pero
si caes en el infortunio
no quedarán
ni
los testigos
de
tu drama.