jueves, 13 de junio de 2013

El Recuerdo de mi Padre


Rectitud y bondad,

firmeza y amor,

sermón andante,

ejemplo que educa.


Paladín de la virtud,

en la rectitud de su honradez

se viste de galas

la bondad infinita.


Su palabra suave

de confines convincentes,

somete a la obediencia

con dignidad e hidalguía.


La misericordia, la devoción

y una fe inquebrantable

eran, de mi padre, la divisa

que me inculcó el amor

a Dios y el camino recto

de la tolerancia y la ternura.


A pesar de la enfermedad cruel

y el cautiverio de la pobreza

que en su pecho abrieron

incurable herida,

nunca cambió su rumbo

con la certeza de la muerte

y más allá de ella

la esperanza de vida.


Padre devoto, amigo fiel,

compinche en las hora malas;

previsor limpia de piedras

el camino,

chapea las espinas y los abrojos,

facilita el paso a sus hijos

y previene los tropiezos.


Hoy todo lo evoco, padre mío;

tus quejidos, la voz triste,

tus palabras postreras,

tus últimos consejos

a mi ceñidos,

la lúgubre tarde que te fuiste.


Oiga el universo este himno,

el clamor de mis versos

y estés dónde estés,

tu alma los perciba;

versos de amor, devoción y respeto

que eternizan en mí

tu presencia siempre viva.


Fallecido el 25 de marzo de 1977 a los 71 años.










                         

miércoles, 29 de mayo de 2013

Poema a los Primos Distantes



Poema a los primos distantes

La vida no se puede ensayar,
Ella transcurre tal cual es,
Y `con el paso de los años ves
Todo en su proceso brillar.

 Como se apiñan en la memoria
Esos recuerdos inefables,
Con solo un botón tocables
Y giran y giran como la noria.

Ya nos alcanzan los años viejos,
Cuando el otrora brioso corcel,
Ha devenido en el renqueante aquel
Jamelgo,  de cascos añejos.

Solo la pluma le saca notas
A aquellos silencios ermitaños,
Que con el paso de los años
En las redes sociales abarrotas.

No ha corroído con el tiempo
El orín de la innoble distancia,
El eterno eslabón que nos alcanza
Sin el menor contratiempo.

Vamos por el mundo desperdigados
Como simples aves migratorias,
Barriendo de nuestras memorias
La distancia y otros vocablos hablados.

Ahí están las limitantes fronteras
Y lleno de obstáculos el sendero,
Mas, nuestro corazón  sincero
Mantiene la llama que un día le dieras.

Se agolpan las ansias de compartir
Momentos vividos, días de amor,
Que por mucho navegar en el dolor
No pierden vigencia, quieren seguir.

Cada cual lleva su vida,
Su historia, su fe, sus ansias,
Sus por qués, en las distancias
Y de la familia siempre cuida.

¡Ay! De aquel primo amado
Que para siempre ha partido,
Dejando desamparado el nido
Y el polluelo abandonado.

Ausentes de su presencia
Todo el que le ha querido,
Llora por el que ha partido
Arropando a su descendencia.

Hoy la nostalgia me abruma
Quiero a todos juntos abrazar,
Satisfecho por poder lograr
El verso que sale de mi pluma.

19 de mayo de 2013.