domingo, 18 de octubre de 2020

Inquietante Desconfianza

Desconfianza, robaste mi paz.

Desconfianza, expoliaste mi sonrisa.

Desconfianza, timadora,

¿por qué llegaste

a desvalijar la armonía?


Ladrona, un día te alejé de mi vida,

¿por qué otra vez llegas

como sutil cleptómana

siseando la concordia?


Te dejo con tu vida, con tu criterio,

con tu gente, que más te entiende,

que recoge tu recelo y tus celos.

No, Desconfianza, lo baladí

no se antepone a lo serio.


Desconfianza,

no cargaré en mi presente,

con tus atracos del ayer,

ni me proyectaré en alguna

víctima, desconocida

que por ti el dolor sufrió.


No hay soledad más solitaria,

que la que deja la sospecha

y si no te asisten las mentiras,

¿cuál es tu origen, Desconfianza?




No hay comentarios:

Publicar un comentario