lunes, 17 de agosto de 2020

EL SOL Y EL MAR

 

Quiero que

sepas,

sin embargo,

que todas las noches

que he dormido a tu lado

hasta las discusiones,

más inútiles,

siempre fueron

algo espléndido.


Sé como el sol,

ora negros nubarrones,

ora “somera niebla”

nunca pierde su fulgor,

nunca su brillo.

El amor semeja al sol.


Sé como el mar,

ora encrespado y bramador,

ora remanso de tenues susurros,

es tan mayor como las edades

y renovado en cada una de sus ondas.

El amor semeja al mar.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario